viernes, 8 de mayo de 2015

La entrevista más corta de la historia

  • Alberto Garzón (IU) arranca la campaña electoral en Zaragoza


La cúpula maña y la estatal de Izquierda Unida, uno de los partidos que más se juega en estas elecciones, se reúne en una mesa del bar del Centro de Historias de Zaragoza. Patricia Luquin y Adolfo Barrena. Cayo Lara y Alberto Garzón. Juntos preparan con su iMac el acto que está calentando la banda Vinos Chueca. Es en Garzón en quien se posan todas las miradas. Se le ve concentrado pero alegre, con las mil y una encuestas en la cabeza y con la esperanza de la remontada en el corazón.

Cuando este red team sale del bar para dar comienzo el espectáculo, Garzón se detiene unos minutos —dos, exactamente— para respondernos a unas preguntas.

La mayoría de las encuestas pronostican una caída de IU en las elecciones de mayo, ¿qué van a hacer durante la campaña para recuperar esos votos?
Debemos hacer pedagogía política sincera y honesta para poder mostrar nuestro programa.

En La Tercera República habla sobre la brecha que se ha abierto en el bipartidismo, ¿cree que la aprovechará IU o que serán otros los que se cuelen?
Tanto IU como otros partidos hemos abierto esa brecha en el bipartidismo, pero lo que tenemos que conseguir es encontrar la manera para que entremos todos encontrando puntos de encuentro.

¿C’s es la marca blanca del PP?
Yo creo que sí, ambos partidos tienen las mismas ideas.

¿Y es un aliado en esa lucha contra el bipartidismo que ellos abanderan?
No, no lo es.

¿Qué tal le sienta la etiqueta de “político guapo”? ¿Nos fijamos más en el continente que en el contenido?
Estamos asistiendo a un momento de espectacularización de la política. Está claro que ser joven y, según dicen, guapo, ayuda. Pero no nos debemos equivocar, porque podría venir alguien joven y guapo y que fuese del PP.



Y entonces su jefe de prensa, que ya llevaba unos minutos inquieto mirando su reloj, nos apremia a terminar. El acto debe empezar y, con él, dos interminables semanas. Nos aseguran que en campaña no duermen más de cuatro horas al día. Los dos se pierden en una multitud de viejos rockeros, jóvenes ilusionados y selfies con la responsabilidad de levantar todo un partido. La campaña ha empezado.

Alejandro Santos
@santosbenedi

jueves, 7 de mayo de 2015

"Como no teníamos un partido al que votar, creamos uno"

Miembro fundador de Chunta Aragonesista (CHA) y su presidente desde su época de esplendor en 1995 hasta su “descalabro” en 2008, Bizén Fuster Santaliestra (Naval, Huesca, 1959) es actualmente concejal en Cuarte de Huerva —el único de CHA— y diputado en la Diputación Provincial de Zaragoza (DPZ) —el único de CHA—.

Bizén Fuster en su despacho en la DPZ


¿Por qué fundar CHA?
1986 era un año políticamente muy complicado. En la derecha aragonesa se había asentado el PAR y en la izquierda había desaparecido el Partido Socialista Aragonés. Nosotros, un grupo de aragonesistas, creímos que estábamos huérfanos de representación y, como no teníamos un partido al que votar, creamos uno.

En la IV Asamblea Nacional fue elegido presidente.  ¿Por qué decidió subir tan alto?
Cuando empezamos, había un grupo pequeño que impulsábamos con más fuerza y fuimos aupados por el resto de los compañeros. Procuramos elegir al primer presidente calvo y con barba para que se viera que no éramos tan niños, pero en el 95 ya teníamos presencia en ayuntamientos, se nos empezaba a ver y había que dar un golpe fuerte de timón.

¿Y su ascenso a presidente fue ese golpe de timón?
De alguna manera formó parte de la entrada de un equipo con más fuerza. Fue dar ese paso adelante y ese mismo año conseguimos entrar en las Cortes de Aragón y en el Ayuntamiento de Zaragoza. Los titulares fueron “CHA irrumpe en las instituciones”. Ahora que lo digo me recuerda a cuando apareció Podemos en las europeas, pero nosotros teníamos cuadros, estructura, posición ideológica en los temas, había…

¿Eso es todo lo que no tiene Podemos?
Es una obviedad. Si después de los resultados de las europeas tuvo que empezar a fijar cuestiones ideológicas, es lógico que antes no las tenía. 

Con usted como presidente alcanzaron los nueve escaños en las Cortes y casi 100.000 votos. ¿Cómo recuerda esa etapa en la que CHA estuvo en la cumbre?
Era una etapa de mucho trabajo, pero muy reconfortante. Las propuestas daban resultado y la gente escuchaba lo que decíamos. Mantuvimos un crecimiento imparable durante veinte años que parecía no terminar nunca [Sonríe]. Fue una etapa absolutamente envidiable y bonita en todos los sentidos.

Parecía para siempre, pero no lo fue. ¿Qué empezó a fallar?
Perdimos el efecto novedad. Por el gobierno que tuvimos en el Ayuntamiento de Zaragoza sufrimos un ataque importante de poderes fácticos que cuestionaron decisiones en las que luego el tiempo nos ha dado la razón.

¿Qué poderes?
Pues económicos, mediáticos… de distinto tipo.

Ya, ya. Pero, ¿qué poderes?
No, mejor no poner nombres.


En 2008 se presentó al Congreso por Zaragoza. ¿Creía que lo iba a conseguir?
El partido pensó que yo era la mejor baza y acepté, pero era consciente de que era un reto realmente muy difícil.

Durante aquella campaña dijo: “El nacionalismo de Madrid es el peor”. ¿A qué nacionalismos se refería?
Pues al PP, por ejemplo. Está lleno de nacionalistas españoles intransigentes, insolidarios y dogmáticos. Existe un nacionalismo solidario, tolerante, dialogante, integrador… como el de CHA.

Sí, pero la frase es jugosa y la dijo en una entrevista a El País… Está bien para conseguir un titular…
Sí, y la mantengo. Y los hechos me dan la razón. ¿O no es un nacionalista español Aznar? Pero creo que bastante menos tolerante, integrador y solidario que yo. Seguro.

Tras esas elecciones abandonó la presidencia, ¿cómo fue dejar la primera línea?
Recuperé bastantes puntos de normalidad. Después de trece años de presidencia, determinadas cosas que eran excepcionales se habían convertido en normales. Me acuerdo que me gustó mucho la primera entrega de premios que hicimos en la fundación tras mi renuncia. Fui a la cena y estuve en la mesa, de ji ji ja ja con los que estaban, sin pensar en cuándo tenía que salir o en cuándo tenía que hablar. De repente descubrí que podía ser un comensal más en la mesa.

Ahora le voy a preguntar sobre la actualidad política. ¿Cree que es un acierto que CHA no se haya unido a Zaragoza en Común para las elecciones locales de la capital?
Hay que ser coherentes. Si tú estas defendiendo la identidad aragonesa, no puedes diluirte en  marcas generales donde Aragón pinta lo que Pichorras en Pastriz. Desde luego, no podía haber un parlamento aragonés sin…

Yo le he preguntado por el Ayuntamiento.
Voy al Ayuntamiento. Este proceso era el mismo que el que nos plantearon para las autonómicas. Nosotros dijimos que no a los dos. En aquel momento, Podemos había acordado en su Asamblea Constituyente que no iban a presentarse a las municipales, por lo que no se iba a producir esa convergencia. Luego se ha producido una engañosa, o incluso fraudulenta, candidatura dando a entender que se ha producido esa coalición. Podemos no está en Zaragoza en Común.

Ni en ninguna candidatura local…
Bueno, en ninguna no. Porque militantes de PODEMOS han creado un partido instrumental, Aragón Sí Puede, también en una especie de fraude de ley. ¿Tú quieres ganarte la confianza de los ciudadanos y lo que haces es engañar a tu propio partido inventándote un partido instrumental cuando tu partido te ha dicho que no te presentes? Yo creo que se lo deberían mirar.

Murillo de Gállego. ¿Qué opina de la alcaldesa de CHA, Marta de Santos, que ahora está en la lista de PODEMOS a las Cortes de Aragón?
Pues mira, es una decisión personal suya. Hace unos meses estaba muy encantada con CHA cuando se presentó a las primarias. Ella quería ser candidata por CHA pero no salió elegida [Silencio]. ¿Qué voy a opinar? Obviamente, le mueve la ambición personal. No hay más.

La última pregunta: ¿cree en la política como oficio?
Llevo muchos años con responsabilidades institucionales, pero nunca he tenido la sensación de ser un profesional de la política. Entre otras cosas porque yo tengo mi profesión [Secretario-Interventor de Ayuntamiento]. Yo defiendo para mis hijos que primero se formen, que tengan una profesión. Luego, si quieren, que se dediquen a la política. Cuando uno no tiene profesión y la acaba encontrando en la política, está obligado a desarrollarla siempre y se convierte en una condena.

Alejandro Santos
@santosbenedi

El año de Zero Grados


El año de Zero Grados
Pocas revistas culturales nacidas en las aulas de las clases de periodismo sobreviven al mes de mayo, pero Zero Grados (zgrados.com)—la revista cultural que te dejará helado— no sólo lo hizo, sino que ha alcanzado los tan codiciados 365 días de vida. Para celebrarlo, su directora, María Angulo, y su subdirectora, Maite Gobantes, organizaron ayer una jornada de periodismo literario en la biblioteca María Moliner de la Universidad de Zaragoza. Al encuentro asistieron directores de otros medios como Pikara Magazine o Estado Mental para exponer sus ideas sobre este género periodístico y sobre el estado de la profesión.

Alejandro Santos
@santosbenedi

viernes, 1 de mayo de 2015

REPORTAJE | Se acaba el tiempo para la filosofía

  • "El edificio está obsoleto", avisa el Decano
  • Tras dos incidentes, los alumnos de Filosofía y Letras vuelven a reclamar la reforma de la facultad

Numerosos desperfectos de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Zaragoza
Fuente: Secretaría del Decano
Hoy va a visitar el campus de Plaza San Francisco de la Universidad de Zaragoza. Por favor, siga el recorrido que le proponemos. Suba a la sexta planta del edificio Interfacultades —por las escaleras si está en buena forma— y contemple desde la biblioteca toda la ciudad. Entre a la Facultad de Ciencias y disfrute con las exposiciones y los suelos de mármol. Vaya a la de Derecho, donde un imponente león del escultor Sergio Abraín le recibirá, y siéntese en el aulario para, simplemente, contemplar cómo pasa el tiempo. Ahora diríjase a la Facultad de Filosofía y Letras y tenga cuidado. No use el ascensor, es pequeño y puede quedarse colgado. Si se encuentra en invierno, evite acercarse a los radiadores en la planta baja y no se quite el abrigo en la planta cuarta. Respecto a los baños, acostúmbrese rápido. Sea paciente con la velocidad de Internet. Los asientos son antiguos, es normal que sean incómodos…

Esta enumeración de incomodidades podría continuar, aunque no pasaría de la mera anécdota si no fuera por un fenómeno inevitable que torna el asunto en algo más serio: la lluvia. Si los habitantes de la aldea  gala de Astérix y Obélix tenían como único temor que el cielo se les cayese sobre la cabeza, a los alumnos que estudian en la Facultad de Filosofía y Letras les ocurre algo parecido cuando llueve. Así quedó reflejado cuando, el pasado día 23 de marzo, tras unas importantes lluvias, un protector de un foco le cayó a una alumna en la espalda. Al día siguiente, un trozo de techo de la sala de lectura se precipitó y hubo que acordonar varias mesas. ¿Es peligroso estudiar en Filosofía y Letras? “No”, asegura el Decano de la facultad, Eliseo Serrano. Sobre estos dos acontecimientos, Serrano dice que la caída del protector es “puntual” y que el estado de la sala de lectura es “preocupante”, pero que esta última estancia no está gestionada por la facultad.

La caída del techo ha provocado la aparición de goteras, que se unen a las que ya hay desperdigadas por los despachos de la cuarta planta del edificio y a las filtraciones en las paredes de los sótanos. "El edificio está obsoleto", concluye el Decano. "Es inservible", añade. Los arquitectos Ricardo Marco y Juan Gayarre, responsables del proyecto de reforma de la Facultad de Filosofía y Letras aprobado en 2006 que aún no se ha puesto en marcha, se unen a las críticas, avisando del "peligro real" que existe para los estudiantes de la Facultad y asegurando que los accidentes y los desprendimientos aumentarán con el tiempo.

Historia de una reforma
La Facultad fue construida al mismo tiempo que los edificios de Derecho y Ciencias, pero estos últimos fueron reformados y, la mayoría de sus fallos, subsanados, mientras que el estado de Filosofía y Letras empeoró gradualmente. La razón por la que se reformaron estos dos edificios antes que Filosofía y Letras estaría relacionada con el número de alumnos –mayor en estas facultades–, según Serrano y Mª José Ferrando, portavoz de Educación en las Cortes y diputada autonómica por el PP.

Techo derrumbado de una sala de la Facultad
Fuente: Secretaría del Decano
La situación se intentó revertir en 2006 cuando se presentó oficialmente el proyecto de reforma y ampliación de los arquitectos Ricardo Marco y Juan Gayarre. La previsión era demoler el edificio de Filología, el más afectado por los desperfectos, construir uno nuevo en su lugar y reformar de forma integral el otro edificio de la Facultad. El proyecto se enmarcó en el Plan de Infraestructuras de 2012 y el Gobierno de Aragón lo exhibía con orgullo. Pero la Facultad de Filosofía y Letras no constituía el único cambio que iban a sufrir las infraestructuras de la Universidad. Las obras en el Paraninfo y en la Facultad de Educación  copaban el presupuesto y la reforma se fue postergando.

La crisis económica llegó y el color del edificio Pignatelli cambió. Pasó 2012 y las obras no comenzaron. En los presupuestos  de 2014, la partida de Infraestructuras para la Universidad contaba con 0 euros, mientras que en los de este año 2015 este apartado ha sido eliminado, según el Decanato. Marco y Gayarre se encuentran sorprendidos por la falta de fondos para el proyecto, mientras que desde el Partido Popular lo achacan a la crisis económica y reclaman que la financiación básica de la Universidad se ha mantenido a pesar de una reducción del presupuesto de Educación de un 14%. 

¿Y de quién es la responsabilidad de que el proyecto vuelva a arrancar? El Decano no tiene dudas, afirma que para el rectorado y para la consejería –especialmente, recalca, para la consejera, Dolores Serrat– la reforma de la facultad "es la prioridad en cuanto a infraestructuras”. Pero, "la presidenta dijo claramente que no había dinero para la Universidad". "Que no hay dinero es una excusa, de vez en cuando ocurren milagros y se han invertido muchos millones en infraestructuras para enseñanzas medias", opina.

En cuanto al futuro, la facultad está preparada para la obra –en el proyecto de reforma se contemplaba cómo continuaría la actividad académica durante las obras– y, para el Decanato, lo ideal sería empezar "hoy". Por su parte, los arquitectos Gayarre y Marco recuerdan que, actualmente, los precios de la construcción son mas bajos que en 2006, por lo que el proyecto se podría contratar por debajo de lo presupuestado.

Ferrando asegura que si su partido vuelve a gobernar, la reforma se llevará a cabo, ya que “sería una imprudencia no realizarla”. Sin embargo, el Decano duda de si el actual ejecutivo realizaría el proyecto. “Me gustaría pensar que sí”, admite. Las tres partes –arquitectos, universidad y gobierno– aseguran querer centrarse en la reforma, pero no descartan el traslado a otros edificios.


“La facultad es la cuna de mucho saber aragonés”, recuerda la portavoz popular. Sería interesante saber qué pensarían María Moliner o José Antonio Labordeta del estado del edificio, pero el tiempo no va hacia atrás, sino hacia delante. Y a la Facultad de Filosofía y Letras se le está acabando.

La facultad de Educación. ¿El ejemplo a seguir? Y en el otro extremo de esta situación nos encontramos con la nueva Facultad de Educación. Esta construcción contó con 17 millones de euros adjudicados en 2006, que se incrementaron en 3 millones en 2012 porque las obras estaban paralizadas. "Faraónica" para la portavoz de Educación en las Cortes y "necesaria" para el Decano de la Facultad de Filosofía y Letras, lleva funcionando desde febrero de 2014, aunque cuenta con desperfectos e incomodidades como la falta de enchufes. Hasta que la construcción de este edificio finalizó, los alumnos de Magisterio recibían sus clases hasta en ocho edificios diferentes, según Heraldo.

Alejandro Santos
@santosbenedi